Es un buen momento para observar estos temas.
la independencia de Kosovo va a ser observada de reojo por mucha gente, quizá no tanto por las evoluciones internas, sino más bien por las reacciones externas, ver como se termina oficializando su existencia como estado (o no) por parte de las diferentes instancias internacionales.
Cuba tiene pinta de ser el caso contrario, la dimisión de Fidel tiene pinta de dejar al asteroide cubano liberado y pendiente de caer en las garras de alguno de los polos de atracción: EE.UU. a través de la disidencia, Europa a través de España y sus intereses económicos, Rusia (improbable) por romanticismo.
Espero que los observadores, especialmente los cercanos, tomen nota de las dos evoluciones, no solo de una.
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Sospecho y deseo que el espíritu del pueblo cubano no sea muy permeable. saludos.
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