La toma de posesión de Obama contra la toma de posiciones de la bolsa

Mientras Obama tomaba posesión de su cargo la bolsa seguía descalabrándose. Mientras Obama hablaba de esfuerzo y trabajo, los especuladores sacaban lo poco que les quedaba de sus ahorros.

Mientras Obama hacía su paseo triunfal Sarkozy forzaba a los directivos de sus principales bancos a renunciar a sus bonuses a cambio de salvar sus instituciones… y Gordon Brown decidía sobre continuar nacionalizando el sistema finaciero de su Reino.

Durante todo el día la CNBC y Bloomberg TV seguían emitiendo  en  el mismo tono que todos los días, excitados por las evoluciones de un mercado que gobiernan los culpables de la crisis.

La evolución de la bolsa tiene difícil solución, los bancos prefieren estar en liquidez e invertir en deuda más que en renta variable y los inversores particulares y empresas ven a sus intermediarios financieros como los  menos apropiados para garantizarles la seguridad de sus inversiones. La bolsa no puede ir bien porque los que tiran de los hilos son justamente de los que no nos fiamos.

En la CNBC y en tantas otras no hace más que aparecer gente que quedará en el paro si se toman las acciones que se deben tomar, entre ellos los propios presentadores de la sección económica.

Obama lo tiene menos difícil para poner la gente a trabajar que para que la bolsa vuelva a ser un instrumento relevante de la economía.

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